No se puede negar que los videojuegos de Riot Games hayan sido un fenómeno brutal de masas desde que, en 2009, lanzaran al mercado el famosísimo League of Legends, amado y odiado por igual. Este famoso juego multijugador de arena de batalla en línea se ha ido expandiendo en sus quince años de historia hasta llegar a ser una de las líneas de juegos gratuitos más conocidas a lo largo del mundo. Riot ha sabido explotar esta franquicia con nuevos juegos que han añadido más leña al asunto, teniendo entre manos juegos como los gratuitos Teamfight Tactics, Legends of Runeterra o Wild Rift, y en otros juegos de pago de lanzamiento en PC y consolas como Ruined King, Song of Nunu, The Mageseeker, Conv/rgence, Hextech Mayhem o Bandle Tale, todos ellos bajo la línea "a League of Legends Story" del sello Riot Forge, recientemente cerrado por la empresa. Todo ello a la espera de la publicación de 2XKO, otro juego más que se une al plantel.
Su trasfondo se ha ido expandiendo, no sólo con la adición de cada uno de sus más de 160 campeones, sino con la presentación de cada una de las temporadas de juego y los eventos que periódicamente sacuden la Grieta del Invocador, el mapa principal del juego. Y es que en este caso no hablamos del típico juego con unas pocas páginas para poder justificar que héroes tan diversos te atraigan lo suficiente como para que pases por caja y los compres, y además quieras hacerte con todos sus aspectos aleatorios, y además quieras exprimirlos y llegar a ser el mejor, el mejor que habrá jamás con ese personaje o en esa posición del mapa, hasta que probablemente te topes con mucha gente con el mismo objetivo y acabes con tus ilusiones por los suelos y quieras volver a desinstalarlo. No, hablamos de un trasfondo que reúne una gran cantidad de culturas y que, con total sinceridad, daría para crear un juego de rol que te haría querer tener todos los suplementos para poder crear una campaña con tintes épicos y que cruce toda Runaterra y los Planos adyacentes a este mundo.
Claro, en eso estoy metido ahora, y me apetecía contarte un poco cómo lo he hecho, por si también te lo estabas planteando.
Qué es Runaterra
Como decía antes, Runaterra es el plano en el que transcurren las tramas de los productos derivados de League of Legends. Su nombre significa 'tierra mágica' en su mundo, seguramente en el idioma noxiano (uno de los imperios de este plano) y está compuesto por un planeta esferoide achatado por los polos, similar al nuestro, y el Reino Espiritual, donde se encuentran algunos de los otros territorios, como el Árbol de Bandle, el Claro o el Vacío.
El planeta tiene varios continentes y un buen puñado de islas que pueblan sus 18 mares cartografiados, entre los que podemos destacar el Mar del Conquistador y el Mar del Guardián. En el continente de Valoran, que es el más septentrional, se encuentran las grandes naciones de Noxus, Demacia y Freljord, así como las ciudades de Piltover y Zaun, dadas a conocer por la serie de animación Arcane, producida por Netflix. El continente del sur es Shurima, que se une a través del puente de las dos ciudades antes mencionadas con Valoran; en él se encuentra el Monte Targon, un lugar lleno de mitología y espiritualidad, algunas colonias noxianas, las naciones de Ixtal o Icathia, y un enorme desierto en el que se han producido en el pasado guerras entre grandes guerreros y magos. Al noreste las islas de Jonia, un enorme archipiélago donde los humanos conviven con los herederos de una cultura ancestral de cambiapieles, además de contar al sur de ellas con otros dos archipiélagos: las Islas de la Serpiente, nido de piratas y la religión de la Gran Madre Sierpe, y las Islas de la Sombra, que como su mismo nombre indica es un territorio corrupto y malvado.
Desde la salida de League of Legends en el ya lejano 2009, la metatrama del propio videojuego ha ido evolucionando a través de las presentaciones de sus campeones del juego o de las temporadas que han ido iniciando cada año, dando así cobijo al mundo competitivo. Aunque el salto definitivo se produciría en 2014, cuando dejaron de lado el concepto de los Invocadores, que eran las representaciones de los jugadores dentro de la partida: líderes políticos al mando de los campeones para luchar en los Campos de la Justicia, por ejemplo la Grieta del Invocador, para evitar una guerra catastrófica. Tras este reinicio, Riot Game contrató a uno de los escritores de Warhammer, Graham McNeill, para dar forma a Runaterra.
Y el resto es historia.
Ejemplos de campañas
En junio de 2020 se llevó a cabo una colaboración entre Riot Games y Wizards of the Coast, llevando a Dungeons & Dragons 5ª edición el escenario pirata de Aguas Estancadas, con la descripción de la ciudad y parte de su trasfondo, tres arquetipos nuevos, varios monstruos y una aventura de nivel 3 autoconclusiva, en la que los personajes se encontrarán en el famoso puerto para verse involucrados en la defensa de la ciudad contra una de las incursiones de enemigos no-muertos. Dark Tides of Bilgewater ofrece, por tanto, la única incursión oficial dentro de este universo de ficción, alrededor de la cual puedes construir una epopeya pirata alrededor de los Mares de la Serpiente y la constante amenaza de la Niebla Negra, o Harrowing, la maldición necromántica procedente de las Islas de la Sombra, que se encuentran bajo el yugo del Rey Arruinado. Puedes encontrarla traducida en castellano por Carlos Dorta en este enlace a su Gumroad, dado que el enlace oficial de D&D Beyond se encuentra actualmente fuera de servicio debido al final de la colaboración entre ambas compañías.
Por suerte, el mundo de Runaterra es tan variado que puedes escoger prácticamente cualquier sistema y darle la oportunidad para desarrollar una campaña. Obviando entonces el sistema, dado que mi experiencia se basa en la planificación y ejecución de una campaña con D&D, según el lugar donde quieras asentar tu campaña provocará que el tono y la ambientación cambien con un contraste destacado.
Jonia, como hemos mencionado antes, está basada en el Japón feudal, algo que recuerda a Leyenda de los 5 Anillos de manera somera, por lo que podrías usar tus conocimientos alrededor de este juego para darle una ambientación concreta, más allá del uso del propio trasfondo, que te recuerdo que es enorme. La temática steampunk victoriana de juegos como Jernhest o Reinos de Hierro puede tener cabida en Piltover y Zaun, mientras que para Noxus este escenario se tornaría más hacia una especie de Imperio Romano del mismo estilo, además de cruel y despiadado, con tintes que puedes sacar de Symbaorum. Demacia tiene una sociedad medieval basada en la protección, una especie de sociedad de paladines en la que, si lees los cómics de Lux publicados por Marvel, te das cuenta de que hay una hipocresía de fondo que dará para muchas sorpresas.
Freljord son los vikingos de esta ambientación, terrenos helados que puedes experimentar con Song of Nunu y cuya mitología puede ser utilizada para momentos épicos contra espíritus y enemigos varios, pudiendo utilizar quizá algo del enorme contenido que ofrecen Walhalla o quizá Trudvang Chronicles. En el desierto de Shurima puedes centrarte en ofrecer partidas de supervivencia en unas tierras pobladas de criaturas que parecen sacadas de la mitología egipcia, mientras que entre estas tierras y Aguas Estancadas se presenta la civilización de Ixtal, centrada en la selva y con tintes cercanos a la mitología precolombina, pudiéndote basar para ello en Nahui Ollin. Los habitantes del Monte Targon adoran a las estrellas, la Luna y el Sol, y son representados también por los Aspectos, criaturas sumamente poderosas que representan poderes celestiales superiores.
En definitiva, teniendo como ejemplos esos juegos para abordar tu propia campaña, podrás desarrollar de una manera más efectiva toda la historia, haciendo que tus Jugadores vivan en esta particular ambientación mil y una aventuras diferentes. Por lo menos yo ya tengo pensadas unas cuantas historias diferentes, para varias campañas que pueden dar mucho de sí, incluyendo el paso de los Personajes por Ciudad de Bandle, una comunidad extraplanar en la que la sociedad yordle comparte con generosidad sus bienes y servicios mediante el trueque, en la que todos tienen algo que aportar y en la que van surgiendo aparentemente para cumplir un propósito en Bandle y Runaterra.
Por supuesto, me basé en los Pitufos para poder desarrollar este escenario y sus aventuras, y debo decir que el resultado ha sido más que satisfactorio.
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